En general, los resultados del tratamiento se mantienen durante un año. Dependerá también del paciente y de sus hábitos alimenticios e higiene bucal. El blanqueamiento domiciliario alarga este periodo.
El blanqueamiento dental es un tratamiento sencillo e indoloro. Sin embargo, en un número reducido de casos puede haber algún efecto secundario, como:
- Sensibilidad dental al frío.
- Irritación de encías.
Estos inconvenientes suelen ser leves y rápidamente recuperables.
No. El blanqueamiento permeabiliza el esmalte del diente con la finalidad de blanquear la dentina que es el tejido que otorga el color al diente.
El esmalte se mantiene intacto tras el tratamiento de blanqueamiento dental. Generalmente el esmalte recupera su estructura 3 días después de la finalización del blanqueamiento dental.
Sí, cualquier persona con una boca sana puede hacerse un blanqueamiento dental clínico. No se recomienda para personas que tengan caries, inflamación de las encías o sensibilidad dental, ya que podría aumentar estos problemas.
No, sólo puede sentirse una mayor sensibilidad al frío que desaparece en los siguientes 3 días. Se recomienda no tomar bebidas frías o calientes durante ese periodo.
Después de hacer un blanqueamiento dental, el esmalte está más sensible y permeable, por lo que se recomienda una dieta “blanca” durante 3 días.
Después del tratamiento se deben evitar frutas cítricas como el limón, el kiwi y el tomate; así como las bebidas demasiado calientes o frías y bebidas o alimentos muy oscuros como el chocolate, el vino tinto o las cerezas.
Una única sesión de 45-60 minutos puede bastar consiguiendo aclarar el color de los dientes hasta 10 tonos.
Se recomienda seguir una dieta blanca durante los 3 días siguientes al tratamiento y cepillarse bien los dientes unos minutos después de haber comido.